Paula Badosa, estrella del tenis español, regresó a Nueva York, donde vivió hasta los siete años, para inspirar a jóvenes a través de la Kings County Tennis League (KCTL). Este programa, apoyado por Laureus, utiliza el tenis y actividades educativas para mejorar la vida de los niños de Brooklyn, eliminando barreras y promoviendo el desarrollo personal. Badosa compartió su experiencia de perseverancia con los jóvenes, destacando el poder del deporte para generar cambios. KCTL, parte de la iniciativa Sport for Good Cities de Laureus, trabaja para brindar acceso al deporte y oportunidades a comunidades en Nueva York y más allá.
La Tennis Rwanda Children's Foundation (TRCF) es una organización sin ánimo de lucro dedicada a introducir el tenis entre los niños vulnerables de Ruanda. Su misión es crear oportunidades de desarrollo personal y social a través del deporte. Al facilitar el acceso al tenis en escuelas, campos de refugiados y comunidades de bajos ingresos, TRCF promueve el bienestar físico y psicológico de los jóvenes.
La fundación opera con un enfoque holístico, ofreciendo no sólo entrenamiento deportivo sino también desarrollo de habilidades para la vida, con el objetivo de empoderar a la próxima generación. Sus programas han llegado a más de 1.500 niños, y planean seguir expandiéndose con más entrenadores e instalaciones de tenis por toda Ruanda. TRCF trabaja con socios y voluntarios internacionales para ofrecer formación y apoyo de calidad, eliminando las barreras financieras y logísticas que limitan el acceso al deporte.
Hospital Sant Joan de Déu Barcelona
Una de las experiencias más significativas para Paula ha sido visitar el Hospital Sant Joan de Déu en Barcelona, donde pasa tiempo con niños que luchan contra enfermedades graves. A Paula le encanta llevar alegría a estos pequeños compartiendo su pasión por el tenis. Durante sus visitas, lleva raquetas, pelotas y otros materiales de tenis, ayudando a los niños a explorar el deporte y a levantar su ánimo. Estos momentos tienen un lugar muy especial en el corazón de Paula, ya que cree en el poder de la conexión, la positividad y la felicidad que el tenis puede aportar, especialmente a quienes enfrentan grandes desafíos.